12 febrero 2007

NO QUEREMOS UNA REVOLUCION VIRTUAL


¿Y que ha sucedido desde el 18 de diciembre de 2005? Mucho . . . los votos rebalsaron la historia que comenzó a teñirse de esperanza. Luego vino la posesión majestuosa, esperada y celebrada por todas las sangres.
Poco a poquito, poquito a poco, la patria va cambiando de rostro. Por todos los confines del territorio patrio, los mas ilusionados, los orgullosos, los que se la juegan son . . . los indígenas. Otros, se la juegan también . . . desde la razón les viene la convicción de que es posible darle otro rumbo a nuestro casi castigo.

Pero despues de unos y otros... el resto nos hemos quedado como simples espectadores, quisá en el mejor de los casos, como opinadores de a pie . . . "queriendo estar pero sin ser llamados". Y es que algo no está bien en este proceso... que en todo caso es bello...

Sucede -como diría un amigo- que las revoluciones se hacen con las manos. ¿Cuantos no quisieran darle un toque, una pincelada? ¿Cuantos jóvenes y adolescentes que ven a éste gobierno como a cualquier otro, no cambiarían su punto de vista si las esferas mas altas del poder, las del medio o cualquiera los convocara para . . . ¿la siembra o la cosecha de quinua? ¿la limpieza de los rios? ¿la campaña de alfabetización? ¿la apertura de senderos y caminos hacia sitio turistinos no explotados? ¿Cuantos artistas están esperando un pequeño impulso para desparramar por las calles su canto, su arte? ¿Cuantos quisieran aprender a tocar sicus, tarkas, tambora y cuantos enseñarlo? ¿ ¿Quienes quieren pintar las paredes con nuevos colores? ¿Donde estan las nuevas consignas? ¿Cuantos chapacos quieren conocer el collao y cuantos collas quieren enseñarselo? ¿Los jóvenes orientales no quisieran compartir un campamento con los occidentales? ¿Como suena tu canto, cómo suena mi canto?

A los hermanos de otros paises, solidarios con nuestra causa, nuestro mayor cariño y el mayor de nuestros respetos pero, nuestro Presidente que nos deje y nos ayude a hacer esto y mas... es esta tambien nuestra revolución y queremos hacerla tambien nosotros . . . construyendo nuevos vínculos, mirándonos los unos a otros, compartiendo el sudor, el cansancio, el pan y la esperanza. Dicen que "se ama lo que se conoce". . . esta podría ser una oportunidad de oro para re - conocernos, para amarnos, para ratificar la convicción que esta patria es nuestra y merece mejor destino. . . que lo construiremos y defenderemos con nuestras manos.